Una invitación a reflexionar sobre la imagen y la simbología de la arquitectura
Mediante el ensamblaje de cajas de cartón, habitantes, transeúntes y todo aquel que quizo se sumó para construir un nuevo edificio para Valparaíso, inspirado en La Sebastiana de Neruda, pero también en cualquier casa de un cerro porteño. No se utilizaron grúas ni máquinas, solo energía humana, es decir, la fuerza de los brazos. Fue una invitación a reflexionar sobre la imagen y la simbología de la arquitectura, revalorizando el cartón como material de la ficción y del sueño. Y además un proyecto social que invitó a los habitantes de Valparaíso a reunirse en torno a la edificación de un monumento utópico y efímero, donde juntos pudimos disfrutar de la experiencia artística.
QUIENES PARTICIPAN

Olivier Grossetete
Graduado en la École des Beaux-Arts. En 2002, comenzó a desarrollar construcciones monumentales colectivas que luego fueran autónomas en relación con la arquitectura…
Leer más