La GFP revolucionó las ciencias biológicas al permitir observar el interior de células vivas
La historia del descubrimiento y desarrollo de la proteína fluorescente verde (GFP) por el cual Martin Chalfie recibió el Premio Nobel junto a Roger Tsien y Osamu Shimomura es un ejemplo de cómo los grandes avances científicos ocurren a partir de descubrimientos accidentales, ignorando supuestos previos y tomando riesgos. “Puedes observar mucho mirando”, dijo Yogi Berra, gran jugador norteamericano de baseball. La frase hace sentido también en las ciencias. Hasta los años ‘90, los biólogos sólo podían mirar bien las células de ejemplares muertos, con métodos que permitían dar sólo un vistazo a lo que estaba sucediendo. La GFP revolucionó las ciencias biológicas al permitir observar el interior de células vivas. ¿Dónde exactamente se encuentran las proteínas dentro de las células? ¿Cómo cambia su actividad a través del tiempo en células normales y en aquellas tumorales, cómo se organizan los tejidos? Son algunas de las preguntas que se pueden responder gracias a la GFP, permitiendo así observar la célula en su totalidad, estudiarla y manipularla
QUIENES PARTICIPAN
Martin Chalfie
Premio Nobel de Química (2008) por el descubrimiento y la aplicación de la Proteína Verde Fluorescente (GFP). Profesor del…
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